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Entrevista a Walter Formica, CEO de Verallia

En una interesante y exclusiva charla con Walter sobre trabajo y vida destacamos:

¿Cuál es su estructura organizacional?

El Ingeniero Walter Formica, Director General de Verallia, en una entrevista personal y exclusiva, confirmó que el factor humano es el mayor capital de la compañía. En su opinión, el trabajador es la pieza de valor y a partir de él es posible construir una empresa exitosa. “El binomio factor humano y clientes son el mayor capital de nuestra empresa”, nos afirmó el ejecutivo.

Es por este motivo, que para los miembros del equipo directivo de Verallia, el desarrollo, formación, incorporación, capacitación, como así también el cuidado del trabajador para que crezca humana y profesionalmente, es la clave del prestigio de la institución.

En cuanto a su estructura interna, Verallia está compuesta por un director general, cuatro gerentes de área: gerente administrativo financiero, técnico, comercial y de recursos humanos, cada una de ellas con sus respectivas jefaturas.

“Cuando el grupo francés Saint-Gobain en el año 1998 compró Verallia éramos 150 trabajadores, hoy integramos 380 personas, lo que demuestra el gran crecimiento que hemos logrado desde aquella incorporación”.

Verallia tiene como misión, ser un proveedor de calidad que aspira siempre a convertirse en un socio estratégico de los clientes, trabajando desde la proximidad y fortaleza como estrategias principales de éxito.

La empresa está enfocada casi con exclusividad al mercado vitivinícola y como objetivo en este sector procuran proveer a la industria del vino, envases de calidad para que ellos puedan ser exitosos en sus procesos internos y comercialización en el mercado interno y externo.

¿Cuál es el crecimiento en la producción de envases de vino y aceites?

A lo largo de los años la empresa ha crecido de manera interesante en volumen de producción, tal es así que en el año 1999 fabricó 70 millones de botellas, número que aumentó considerablemente llegando en el 2013 a 500 millones de envases de vidrio.

El 98 % de la producción de Verallia está dirigido a la industria vitivinícola en cuanto al formato del producto, destinado tanto a vinos tranquilos como a espumantes, y el 2 % restante de la fabricación está destinado al aceite de oliva de Mendoza.

¿Hay menos producción de botellas para aceite por razones de mercado o por elección de la compañía?

“El mercado de aceite de oliva en botellas de vidrio tiene un potencial muy grande por la calidad de materia prima que posee Mendoza y en este aspecto podría decirse que se emula a la industria vitivinícola”

Provincias como Catamarca, La Rioja y San Juan son zonas que a partir de la promoción industrial se convirtieron en las más importantes, aunque sin duda las mejores condiciones climáticas están en Mendoza.

¿La industria olivícola se está asemejando a la vitivinícola en sus inicios?

La gran diferencia es que la industria vitivinícola tiene una estrella, el Malbec, que es un elemento diferencial en el mundo, la carta de presentación del vino Argentino. Cuando la gente en el mundo dice Malbec, dice Argentina. En cambio, en la industria olivícola no hay una estrella, un elemento diferencial como lo es el Malbec en el mundo del vino.

Si bien hay muy buena calidad  de aceite en Argentina, el desafío del sector es y será por los próximos años despertar la conciencia de consumo de aceite de oliva, apoyándose en todos los beneficios que éste tiene por sobre el resto de los aceites.

¿Qué campañas de comunicación comercial hacen para que el mercado de botellas de aceite crezca como el de envases de vino?

“En Verallia hacemos campañas de comunicación comercial para el consumo del vidrio en general, como un producto noble y con un sinfín de beneficios y ventajas”. Por su parte, también se diseñan modelos de botellas para el aceite de oliva con estructuras muy modernas y actualizadas, puesto que la existencia en el mercado se corresponde con diseños antiguos y  típicos.

¿Qué ventajas tiene ser el Director de Verallia?

“La gran ventaja es que siento pasión por lo que hago. Soy de las personas que no le cuesta levantarse para ir a trabajar, me encanta lo que hago, disfruto de mi trabajo”.

Walter Formica posee formación universitaria como ingeniero en petróleos y por haber completado estudios de posgrado y capacitaciones complementarias en negocios, conoce bien el rubro en el que se desempeña. Toda su vida se ha dedicado a la venta y  entiende lo que es fabricar. La empresa del vidrio es muy rigurosa, funciona 24 horas todo el año; se la considera un rubro peligroso y agresivo, porque se manejan altas temperaturas en el proceso de producción.

Un aspecto significativo de Walter es que es mendocino, y para la zona geográfica donde se desarrolla la mayor parte de Verallia, es importante tener un nativo que entienda este negocio, sumado a sus conocimientos en enología, estrategias de marketing, aspectos comerciales y técnicos del negocio del vidrio.

¿Cómo logra el compromiso y motivación de su equipo de trabajo?

“Soy una persona que intenta estar comunicado directamente todo el tiempo, aprovechando la  estructura organizacional plana y accesible de Verallia. Hablo con todos mis colaboradores que están en planta, eso me permite transmitir sinceridad y claridad. Procuro ser percibido como  transparente y sensato, sobre todo dejando claro hacia dónde se dirige la compañía. Le impongo mucha pasión a lo que hago y creo que contagio optimismo, tratando de ver la realidad proactivamente para sortear las dificultades que tenemos.”

¿Cómo es la tecnología que tienen disponible para producir?

Verallia utiliza tecnología de última generación, lo último que se conoce en la industria del vidrio para producir está instalado en nuestra planta en Mendoza.

Inauguramos el último horno el 1 de noviembre del 2012, y por estos días estamos reequipando otro horno que se instaló en el año 2000 con el mismo nivel de tecnología que éste más reciente.

¿Cómo se sintetiza el proceso de fabricación de botellas?

El vidrio es una mezcla de sílice, carbonato de sodio, y otros componentes como la caliza. Estos materiales ingresan a un horno refractario que se construye artesanalmente en donde la mezcla se funde a 1600 grados.

Verallia cuenta con un equipo encargado de recolectar vidrio de frascos y envases. Este vidrio se muele, luego ingresa a un horno  junto con arena, soda, caliza, y otros materiales para que la mezcla tome color. En la medida que para la fabricación de botellas se utiliza vidrio reciclado, se consume menos energía porque es más fácil el proceso de fundido, y por lo tanto, se contamina menos el medio ambiente.

Una vez ingresados los productos en el horno y como consecuencias del intenso calor que se le aplica, se obtiene una masa vidria líquida que sale del horno hacia canales que conducen hasta las maquinas formadoras de botellas. Se utilizan dos moldes. En el primero cae una gota de fuego de vidrio de color rojo, totalmente incandescente, a la cual se le forma una boca o lo que se llama en la industria del vino, vela, que a través de un sistema mecánico de presión con un punzón, entra en esa masa y produce un orificio.

Posteriormente, esa vela pasa a un segundo molde que ya tiene la forma definitiva que tendrá la botella. A  través de esa boca que se hizo en la etapa anterior, la botella recibe un soplo de aire a presión, entonces el vidrio que es plástico a la temperatura en que se encuentra en esta parte del proceso, se expande y toma la forma de la botella definitivamente.

Este recorrido se desarrolla de manera automática, el molde que contiene la botella se abre y la misma es depositada hacia una cinta transportadora que dirige las botellas a un sector donde se realiza un tratamiento que recibe el nombre de “en caliente”. Aquí, se pulveriza la botella con algunos componentes que le dan resistencia, ya que el vidrio es un líquido subenfriado que pierde calor a altísima temperatura y de manera rápida. Luego, el vidrio, que es un material muy frágil, debe pasar por un tratamiento que se llama “de recosido” en una estufa industrial que calienta nuevamente la botella para luego ir haciéndole descender la temperatura de manera paulatina para que no sufra daños.

Este proceso comienza a una temperatura muy alta de 1600 grados y culmina con unos 60 a 70 grados. En ese pasaje de temperatura, la botella se acomoda a la estructura interna del vidrio para que no se rompa, y luego pasan por un tratamiento en frio donde se pulverizan materiales de plástico líquido para que no se rayen.

Posteriormente las botellas pasan por una etapa final de control de calidad, a través de máquinas que verifican el material, para luego ser enviadas a una paletizadora de la que se obtienen pallets con 1500 botellas cada uno.

¿Están innovando en nuevos materiales y aplicaciones especiales?

En el año 2009, Verallia comenzó a desarrollar una línea de envasas llamada Ecova, palabra que deriva de ecología y la terminación “va” de valor. Esta línea es con la cual la empresa da sus primeros pasos en la realización de estudios, proyectos, pruebas e investigaciones para reducir el peso de las botellas de vidrio, logrando con éxito este objetivo.

La razón fundamental por la que Verallia desea una botella más liviana, se basa principalmente en el factor ecológico. Al producir botellas de vidrio con menor peso, se consume menos energía en el proceso de confección, por lo tanto se contamina de manera considerable menos el ambiente; mientras que a su vez se necesita menor cantidad de energía para trasportar el producto ya que entran más unidades de botellas en cada vehículo. Por lo antedicho, es que los envases Ecova de Verallia son reconocidos en el mercado como “ecofriendly” (amigables con el medio ambiente).

Esto proceso de botellas livianas comenzó en el año 2009 ocupando un 15% del total de la producción de unidades de vidrio; en 2014 la empresa espera superar el 75% de la producción total con este tipo de envases, con el desafío operativo de obtener cada vez mayor cantidad de botellas livianas para reemplazar a los tradicionales envases pesados.

Bajo el nombre Ecova, Verallia se enorgullece de ser la empresa creadora de la botella más liviana del mundo destinada a vinos espumantes y champagne. Esta botella se llama Suyai como la reina de la vendimia del año 2013, pesa 380 gramos y está dedicada al mercado interno y exportaciones.

Realizan una fuerte apuesta a la innovación de colores y fabrican por 1º vez en Argentina el color miel, que se había dejado de producir y está dirigido a las botellas que contienen vino Chardonnay y Torrontés por su color amarillo. Además sus esfuerzos están dirigidos a fomentar la calidad del envase con tecnología de punta e investigando nuevos colores para el mercado de  vinos de primera línea al que llamaran “canela”, mezcla de verde y ámbar.

Sin perder de vista la necesidad de crear botellas con otros calibres como como la de 500 cm3 y de 375 cm3, ya que el consumo individual de vino está creciendo cada vez más y su destino principal son los restaurantes.

Un poco de Historia sobre Grupo Saint-Gobain la empresa más antigua del mundo

Verallia es la empresa líder mundial en el sector de envases de vidrio para vinos, licores y frascos alimentarios. Produce cada año más de 26.000 millones de botellas y frascos de vidrio para más de 20.000 clientes repartidos en 46 países de todo el mundo.

Verallia, es la marca bajo la cual se engloba la actividad de Packaging del Grupo Saint-Gobain a nivel internacional y su estrategia se base en la alianza de Fortaleza y Proximidad orientada al servicio de sus clientes.

La empresa francesa Saint-Gobain llega a Argentina en el año 1998 cuando haciendo una apuesta fuerte siempre a sectores vitivinícolas decidió desembarcar en Mendoza, ya que el 85%  de la actividad vitivinícola se concentra allí. El grupo francés creció en el mundo del vidrio y fue quien incursionó en el negocio de envase de vidrio.

En ese entonces, Verallia tuvo 2 alternativas para instalarse en Argentina, generar un Green Field (nueva empresa) o comprar una ya instalada; opción por la que finalmente optó. Por su buen nombre, calidad e imagen, Rayen Cura fue la empresa familiar elegida por Verallia para adquirir.

Sobre Walter

  • Título profesional: Ingeniero en Petróleos
  • Cargo en Verallia: Director General
  • Deporte favorito: Fútbol
  • Hobby: Cine/ Teatro
  • Casado: SÍ
  • Hijos: 2
  • Un libro: La Biblia
  • Un lugar ideal: Mendoza
  • Frases infaltables en su filosofía de trabajo y de vida:

El factor humano y los clientes son el mayor capital de una empresa.

Optimismo es ver la realidad de manera proactiva de cara a las dificultades que se enfrentan.

Fuente: MASSNEGOCIOS Diario Online

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