En la tarde del lunes 6 de mayo, MODO, la plataforma respaldada por más de 30 bancos tradicionales, acusó a Mercado Libre, la empresa liderada por Marcos Galperín, de abuso de posición dominante. La respuesta de Mercado Libre fue rápida y contundente, refutando las acusaciones y contraatacando con acusaciones propias: «MODO, conformada por 36 bancos, se encuentra bajo investigación por prácticas cartelizadoras y discriminación por parte de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC)», afirmó MELI en un comunicado reciente.
Entre las acusaciones planteadas por la firma de Galperín, se encuentran la promoción de prácticas perjudiciales para la industria fintech y millones de consumidores, la limitación de transferencias entre cuentas bancarias (CBU) y cuentas virtuales (CVU), y la repetición de prácticas previamente consideradas anticompetitivas por la CNDC, en el caso más notable de Prisma, que marcó un hito en la competencia en las últimas décadas.
El comunicado compartido por Galperín en sus redes sociales señaló con asombro: «Resulta curioso que los mismos bancos que en 2020 crearon MODO con objetivos similares para evitar competir entre sí, ahora estén nuevamente bajo investigación por cartelización».
Mercado Libre explicó que a lo largo de los años ha asumido riesgos, invertido, generado empleo y desarrollado productos y tecnologías para simplificar lo que antes era complejo: obtener una tarjeta, generar rendimientos en cuenta o solicitar un crédito, entre otros servicios. Además, destacó que gracias a Mercado Pago, millones de argentinos pudieron acceder por primera vez a generar rendimientos con su dinero.
La empresa también resaltó su alcance, indicando que más de 13 millones de personas en todo el país utilizan Mercado Pago, y ofreció datos numéricos sobre el impacto positivo de su ecosistema fintech. «En los últimos 12 meses, hemos otorgado más de 17 millones de créditos a personas y pymes, muchas de las cuales nunca antes habían tenido acceso a este tipo de financiamiento», afirmaron en su comunicado oficial.
Respecto a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, argumentaron que esta entidad no solo descartó problemas de competencia, sino que reconoció los beneficios de la integración entre Mercado Pago y Mercado Libre para el funcionamiento eficiente y seguro de la plataforma.
La empresa consideró «absurdo» el reclamo de los bancos, comparándolo con pretender que un supermercado ofrezca productos de marca propia de su competidor, o esperar que los bancos ofrezcan los productos y servicios de Mercado Pago en sus sucursales y plataformas online.
Finalmente, Mercado Libre señaló que la acción de MODO llega poco después de que vencieran los plazos establecidos por el Banco Central para la interoperabilidad de tarjetas de crédito con códigos QR. A pesar de la negativa de los bancos a acordar condiciones comerciales, Mercado Pago cumplió con la normativa, abriendo su red. En lugar de cartelizarse y acusar sin fundamentos a Mercado Pago, los bancos deberían competir, innovar y desarrollar productos, concluyó la empresa de Marcos Galperín.
¿De que se acusa a Marcos Galperín?
La acusación de los bancos se centra en comportamientos anticompetitivos que infringen la Ley N°27.442 de Defensa de la Competencia (LDC), presentada ante la CNDC por MODO. Esta acusación apunta a prácticas de abuso de posición dominante de tipo exclusorio.
MODO, integrada por los principales bancos públicos y privados como Macro, Santander, BBVA, Galicia, ICBC, Nación y Ciudad, entre otros (con la excepción de Banco Provincia), destaca varios comportamientos problemáticos. Entre ellos, la negativa a incorporar billeteras digitales competidoras en su marketplace, otorgando exclusividad a Mercado Pago y rechazando el acceso a aquellas que solicitan ser iniciadoras de pagos en la plataforma.