Vamos a ponerlo de esta manera para que quede muy simple: en lugar de alojar personas, el hosting web aloja los contenidos de tu web, tales como tu correo electrónico, datos, imágenes, etc., para que cualquier internauta pueda visitarla en todo momento, desde dispositivos conectados a Internet.
Dicho de otra manera, cuando por ejemplo queremos consultar algún archivo en una computadora o smartphone personal, nos encontramos con que el contenido se encuentra almacenado en algún sitio, ya sea una tarjeta de memoria, disco duro o almacenamiento del dispositivo. Esto es lo mismo que sucede con el contenido de las páginas web, es necesario contar con un servidor web que almacene datos para que pueda ser visitado por cualquier persona.
Ahora, cabe destacar que los servidores que hacen de soporte físico a los hostings, son aparatos mucho más potentes que una PC de hogar. Están conectados a Internet las 24 horas del día, para que los contenidos almacenados puedan ser visitados en cualquier momento y desde cualquier lugar sin interrupciones. Este servidor del que hablamos, es el equipo físico que almacena datos, y desde él se ofrecen diferentes tipos de hosting web según los requerimientos del cliente.
Diferentes tipos de hosting: ¿cómo elijo el adecuado?
Como dijimos anteriormente, los proveedores de este servicio ofrecen distintos tipos de almacenamiento web según la necesidad y el alcance de sus clientes. Está claro que no necesitará la misma capacidad de almacenamiento, alguien que quiera poner online un portfolio o un blog, que una empresa que necesite montar un ecommerce que contenga miles y miles de referencias. Así que, siempre se deberá elegir un buen servidor, acorde a las necesidades de la página web.
Existen cinco maneras de almacenar los datos de una página web, te las explicamos aquí:
- Hosting compartido: es el más utilizado. Se trata de un servidor físico que contiene un número determinado de páginas web a la vez. Los sitios web que emplean este hosting, comparten los mismos recursos del servidor, ya sea el procesador o la memoria RAM.
- Hosting VPS: (servidor privado virtual) en este, los sitios web no comparten los recursos del servidor, a diferencia del Hosting compartido.
- Hosting elástico: reúne las ventajas de los hostings anteriores. Se comparte el servidor entre varios usuarios, pero contando con algunos recursos por separado.
- Hosting Cloud: como su nombre lo indica, es el almacenamiento en la nube. Es un alojamiento que almacena la información de una página web en varios servidores. Están conectados a una misma red y trabajan en conjunto. Este hosting se usa mucho en páginas web que identifican altos picos de tráfico en diferentes momentos del día.
- Servidor dedicado: este es más exclusivo, tiene un servidor dedicado a cada cliente, un equipo físico para cada usuario. No comparte recursos con otros sitios web y el servidor y todos los recursos están 100% disponibles y destinados a una única cuenta.
Cuando hablamos de un proyecto personal o profesional, es fundamental contar con un proveedor de servicio de confianza. Una empresa seria, que sepa empatizar y entienda la importancia de tu web.
Te recomendamos investigar y seleccionar una empresa de hosting Argentina confiable y dedicada 100% a hacer crecer tu web. Si estás comenzando, es recomendable que consultes con profesionales que saben del tema y te indiquen qué tipo de hosting es conveniente para empezar a alojar tu web en un servidor.
Esperamos que esta información te sirva para hacer crecer tu empresa en internet.
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