Se trata de Gustavo Milutín, un joven economista de 30 años, que actualmente ocupa el cargo de CEO en INAP, la empresa que se reinventó en la pandemia fabricando productos sanitizantes. “Empoderar a los jóvenes y brindarles una plataforma para que sus voces y opiniones tengan un papel fundamental en el rumbo de una empresa es la solución”, afirmó.
Gustavo Milutín, un joven economista de 30 años, que actualmente ocupa el cargo de CEO en INAP. Comenzó su carrera profesional en esta empresa desde temprana edad, pero luego se trasladó a Buenos Aires para trabajar en el mercado financiero. Sin embargo, cuando la pandemia golpeó y generó una crisis en INAP, Gustavo tomó la decisión de regresar a Mendoza con el objetivo de revertir la situación y llevar adelante la empresa. Hoy, el enfoque de Gustavo y su equipo está en nuevos desafíos y un plan de negocios renovado. Tienen grandes expectativas de fortalecer las unidades de negocio en el extranjero y continuar creciendo.
Justamente INAP es una destacada empresa argentina que tiene su sede en la provincia de Mendoza. Su enfoque principal se centra en la comercialización, fabricación y distribución de productos químicos especializados destinados a la lubricación y limpieza en el ámbito industrial. Además, INAP brinda una amplia gama de servicios que incluyen la provisión y el mantenimiento de equipos, así como la dosificación precisa de productos en las líneas de envasado de sus clientes. Con un compromiso inquebrantable hacia la excelencia y la satisfacción del cliente, la empresa se ha convertido en un actor clave en la industria, brindando soluciones confiables y de calidad para las necesidades de lubricación y limpieza de sus clientes en todo el país.
En esta ocasión Gustavo brindó una charla exclusiva para inspirar a las PYMES a crecer a pesar de una actualidad sociocultural inestable.
Como empresario, ¿qué opinas sobre la situación coyuntural de Argentina?
Creo que hay una desconexión alarmante entre lo que ve el gobierno y la realidad del país y quiero creer que es una desconexión por ignorancia y no por desinterés.
Por ejemplo en las importaciones. Yo soy industria nacional, fabrico, pero varias materias primas son nacionales y otras materias primas son internacionales, porque no se fabrican en el país por diferentes motivos, y me cuesta conseguirlo. Y uno diría; como las importaciones están trabadas yo puedo competir más libremente con mi competencia. Si bien los clientes te llaman porque la competencia no está pudiendo abastecer, no está bueno no tener competencia. Porque necesito alguien al lado haciendo un producto y viendo cómo puedo innovar.
Entonces te muestran que hay una desconexión porque no entienden cómo funciona la economía y el mercado, es preocupante realmente. Tienen números de inflación altísimos, el 12% salió este último mes más o menos. Y la solución no es estar mostrando los índices de precios toda la semana. Lo veo preocupante y desalentador realmente. Es triste.
¿Estás de acuerdo con dolarizar el país?
La dolarización me parece una buena manera de estabilizar el país, en el sentido que atas tu política monetaria a una moneda y a un Banco Central que tiene cierto grado de responsabilidad distinto al nuestro. Hoy en día gastamos más de lo que recaudamos y ese es el eterno problema. Y si vos dolarizas se acabó, no vas a podes gastar más de lo que recaudas porque no tenés como financiar ese déficit.
Por otro lado, lo que tiene positivo es que los precios pasan a ser precios reales.
¿Cuáles son los principales peligros que rodean la empresa?
Todo lo que es la falta de insumos importados, uno de los principales peligros. Por otro lado la carga impositiva es cada vez más violenta, yo pienso en crecer todo el tiempo, tengo una proyección de crecimiento en Argentina lo que implica contratar gente y sin embargo eso implica obviamente tener que pagar más impuestos, cuando querés vender en otras provincias tenes que pagar impuestos. La AFIP no te perdona ni da plazos. Otro problema que tengo es la falta de estructura de logística. Hoy siendo una empresa de Mendoza que venden en Buenos Aires, yo recurro al transporte de camión, si hubiera otros sistemas como el ferrocarril sería más eficiente y barato.
Y otra amenaza es el salir a buscar talentos afuera. Hay gente que está poco preparada técnicamente, porque el nivel de educación ha caído muchísimo, y hay gente que realmente tiene una cierta necesidad que no se podría cubrir.
¿Y las oportunidades?
Argentina es un lugar hermoso, como siempre digo es un país que hoy está mal manejado pero tiene oportunidad porque los recursos y las riquezas no desaparecen, cambian de mano. Nosotros en ese sentido entendimos que había que salir ampliar el mercado, arrancamos con el mercado vitivinícola, el mercado de gaseosas, mercado avícola. Vamos abriendo distintos nichos de mercado y nos vamos acomodando a la demanda de hoy.
¿Cómo puede sobrevivir una PYME?
La verdad que hoy en día dependiendo el rubro, es muy relativo. Nosotros que somos PYME que fabricamos estamos estoqueados en mercadería, el efectivo es administrado para tener mercadería permanentemente e ir haciendo ciertas previsiones. Hay que ir tratando de tener un cierto consenso con algunos proveedores, con los bancos para poder ir charlando a ver hasta dónde podés llegar cómo te pueden acompañar, cómo podes acompañarlos a ellos. Y en lo personal acelerando en la parte comercial, yo creo que hay muchos que son más conservadores y dicen; yo no vendo porque no sé a qué precio voy a reponer. Es cierto, pero de nuevo hablando las oportunidades, ahí tenés una oportunidad porque ahí sí te digo salir a vender cuando nadie quiere vender, es una oportunidad. Es una estrategia válida, uno cuando empieza a vender genera vínculos comerciales y el cliente en momentos de estrés es donde te valoran.
Entonces, tratas de estoquearte de mercadería y de entrar por una ventana en los lugares sin mucha concurrencia. Tener calma a la hora de tomar decisiones es clave, porque no es un momento para tomar decisiones impulsivas.
¿Podés extraer algo positivo para este año?
A nivel empresa fue un año donde empezamos a trabajar con objetivos y un horizonte claro y hoy, a 3 meses de terminar el año, nos hemos mantenido dentro de esos horizontes cumpliendo el 70% de los objetivos, que para el contexto macroeconómico no está mal .
Estoy contento también porque hemos diagramado un nuevo modelo para dirigir la empresa, con un nuevo directorio, una visión más estratégica, con miembros de la familia y miembros externos a la familia lo que permite articular nuevas ideas y ciertos consensos, que antes no estaban.
Otra cosa que veo positiva en el mundo macro, es el resultado de las PASO, que más del 50% del país votó un modelo totalmente distinto al que veníamos transitando hace muchos años. Se votó algo distinto y eso te da esperanza, porque gane quien gane vamos por otro camino. Creo que tanto Bullrich o Millei están calificados para gobernar.
Más sobre INAP y su compromiso con el medio ambiente
Tras el desafiante año que fue 2020, marcado por la pandemia, el 2022 representó un período de adaptación y ajustes INAP. Sin embargo, el 2023 ha surgido como un año de consolidación y crecimiento sin precedentes. Durante ese tiempo, la empresa ha logrado fortalecer la organización, estableciendo un nuevo directorio, formulando visiones renovadas y desarrollando estrategias innovadoras que han permitido establecer nuevas bases comerciales sólidas.
Hoy en día, cuentan con un equipo de 30 empleados altamente dedicados. “Es notable mencionar que más de la mitad de nuestro personal son jóvenes talentosos, y tres personas en nuestro directorio tienen menos de 30 años. Esto refleja claramente nuestra estrategia de empoderar a los jóvenes y brindarles una plataforma para que sus voces y opiniones tengan un papel fundamental en el rumbo de la empresa” aseguró Gustavo.
INAP está dando pasos significativos hacia la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental en la actualidad. La empresa está enfocada en la creación de productos basados en componentes orgánicos, demostrando un claro compromiso con la conciencia ambiental y la contribución a soluciones en lugar de agravar problemas.
Los productos en desarrollo se perfilan como soluciones integrales para el medio ambiente y la eficiencia industrial. Uno de los aspectos más notables de estos nuevos desarrollos es su capacidad para ahorrar recursos valiosos. Estos productos no solo prometen un uso más responsable del agua en los procesos de limpieza industrial, sino que también ofrecen ahorros sustanciales en términos de energía y tiempo humano. Este enfoque no solo beneficia a la empresa, sino que también contribuye de manera significativa a la preservación del entorno y al bienestar general de la comunidad.