Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Dieta mental

Solemos hablar de dietas específicamente de alimentación para ayudarnos corporalmente, pero, ¿alguna vez hiciste una dieta mental? Es muy importante tener el cerebro saludable.

En la mayoría de nuestros días, tenemos el cerebro repleto y explotado de pensamientos, ideas, palabras, etc, y muy pocas veces le permitimos descansar…

En una dieta se habla de eliminar o reemplazar las cosas que nos hacen mal y equilibrar la alimentación. ¿Qué alimentos le estás dando a tu cerebro? ¿Qué es lo que consume diariamente?

Quizás estás teniendo muchos pensamientos de no posibilidad y/o miedo, que te alejan de lo saludable y lo que te hace bien.

¿Te pusiste a pensar en la pirámide nutricional de tu mente?. ¿Cuáles son los pensamientos que tenés como principales?. ¿Cuál es la base de tu pirámide?

Necesitamos aprender a entrenar nuestra mente para cambiar creencias y así, dejarla a dieta de todo lo que la intoxique. Cuando aparezca un pensamiento negativo, reemplazarlo inmediatamente por uno que abra posibilidades, que cambie el punto de vista.

¿Qué colaciones diarias le estás aportando? ¿Cuáles son tus permitidos?

Quizás para hacerlo descansar un rato, deberías permitirte hacer cosas que te hagan bien, que te gusten… Hablar con gente que sume, leer un libro que potencie, buscar referentes que te ayuden a avanzar.

TIPS PARA LA DIETA:

  • Evitar pensamientos negativos
  • Eliminar personas tóxicas
  • Evadir de lo que me borra la sonrisa
  • No consumir lo que me hace mal
  • Apagar lo que me distrae de mi camino
  • Hacer más de lo que me gusta
  • Conectarme con gente que me haga bien y me sume
  • Reemplazar un pensamiento negativo con uno positivo
  • Crear nuevas ideas y caminos
  • Tener una alimentación mental variada

De la misma manera que dejamos entrar a nuestro cuerpo toxinas, comida “chatarra”, lo hacemos con nuestra mente.

¡Aportémosle más nutrientes, cambiemos nuestra alimentación mental!

Contenido exclusivo para MASSNEGOCIOS Diario Online

Fuente: Estefanía Talaván

Sé el primero en comentar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *